Miradas múltiples a la violencia de género comparten espacio virtual

Tomado de: www.redsemlac-cuba.net
Por: Dixie Edith

Un desafío esencial para la atención de la violencia de género en Cuba pasa por contar con un levantamiento que mapee y sistematice todas las acciones que se realizan en el país, en busca de articular una ruta más integral para la prevención, acompañamiento y atención de esa problemática.

Posicionada por la socióloga Clotilde Proveyer Cervantes, tal urgencia quedó recogida como una de las principales conclusiones del primer taller nacional del Capítulo Cubano de la Red Regional de Estudios sobre la Violencia Basada en Género (RREVB) en el Caribe Insular, celebrado el 10 de diciembre entre especialistas de todo el país.

Nombrado “Dialogando desde los territorios en torno a la violencia basada en género”, el encuentro virtual, desarrollado vía Google Meet, reunió a profesionales de la pedagogía, la comunicación, el derecho, la sociología, la psicología y las ciencias de la salud, entre otros perfiles, en busca de sistematizar avances y brechas para la atención a la violencia a nivel territorial.

La permanencia de estereotipos y roles en la socialización de género, vista desde diferentes aristas, capitalizó muchos de los acercamientos investigativos presentados y confirmó a las poblaciones jóvenes como demandantes de atención particular, desde la prevención de las desigualdades que originan la violencia de género.

Estudios realizados en la Universidad de Ciencias Médicas de Cienfuegos, provincia central localizada a unos 250 kilómetros de La Habana, confirman la violencia en el noviazgo como “muy frecuente” entre jóvenes universitarios, lo cual demanda estudios más profundos y generalizados en todo el país e intervención urgente.

El 55,40 por ciento de 74 estudiantes de Medicina de ambos sexos entrevistados para la indagación confesó “haber vivido situaciones de violencia en casi todas sus tipologías”, confirmó el poster presentado por Yamila Ramos Rangel, Laura Magda López Angulo, María Suz Pompa y Daniela García Ramos.

La violencia más experimentada por ambos sexos es la psicológica, en particular la derivada del control y de los celos. Entre las muchachas, las manifestaciones menos identificadas fueron la humillación y la coerción, pero reconocieron en mayo grado la violencia sexual. En tanto, los muchachos refirieron recibir, mayormente, celos y control.

Sin embargo, al indagar sobre quiénes y cómo se ejerce la violencia, ellas admitieron practicar más violencia psicológica asociada a los celos, seguida de la humillación y la coerción. En tanto, ellos perpetraron más todos los tipos de violencia psicológica.

Resulta paradójico que, aunque más de la mitad de los hombres entrevistados dijo haber ejercido violencia física, esta forma de maltrato fue la que reportó las puntuaciones más bajas, precisaron las investigadoras.

Para este equipo de trabajo es particularmente preocupante que estas formas de maltrato ocurran con esos niveles de frecuencia, justamente entre estudiantes de Medicina. A la par, destacaron su carácter bidireccional y cómo muchachas y muchachos actúan indistintamente como receptores y perpetradores.

En el extremo este del país, en la provincia de Guantánamo, a más de 900 kilómetros de la capital, otra investigación posicionó la violencia en el escenario familiar, particularmente entre mujeres jóvenes, entre 25 y 35 años, la mayoría amas de casa.

Las investigadoras Meglis Rivero Favier y Nayra Martínez Manzanares, de la Universidad de Guantánamo, precisaron que estas mujeres jóvenes han sufrido principalmente violencia física por parte de sus ex parejas.

Sin embargo, el hecho de considerarse como lesiones no graves y no tener aún la violencia de género un reconocimiento explícito en el Código Penal vigente, ha dejado a estas mujeres, en muchas ocasiones, en situación de mayor vulnerabilidad.

Al respecto, Proveyer comentó el valor de la recién aprobada Estrategia integral de prevención y atención a la violencia de género y la violencia en el escenario familiar, publicada el 9 de diciembre en la Gaceta Oficial de la República, como norma vinculante para la atención a las violencias desde todas las instituciones y organismos del Estado.

El taller también incorporó análisis sobre las brechas para la atención a la violencia de género en la legislación cubana actual, el maltrato asociado a la práctica de sexo transaccional, el bullying escolar, el empoderamiento femenino en el ámbito laboral y las violencias en los espacios digitales, entre otros.

La Red Regional de Estudios sobre la Violencia Basada en Género está integrada por profesionales de Haití, Cuba y República Dominicana, con el objetivo de fortalecer las estrategias regionales destinadas a eliminar la violencia basada en género, a través de diferentes procesos investigativos de enfoque interseccional, que apoyen la construcción de un marco teórico, conceptual y jurídico.