Significación de las creencias y práctica religiosa para el creyente cubano. Relación con los cambios sociales (1998)

  • por

O. Pérez y A. C. Perera. La práctica investigativa conduce a pensar que en el cubano, mayoritariamente con creencias sobrenaturales, las creencias se manifiestan de muy diversas maneras. En tal sentido los niveles de regulación o las formas en que las creencias se manifiestan pueden valorarse a partir de indicadores como la sistematicidad en la práctica religiosa, la organización de la actividad religiosa y el conocimiento religioso que se tenga, entre otros. No obstante, estos indicadores no excluyen que existan conductas que cumpliendo los requisitos anteriores no trascienden la formalidad. Del mismo modo pueden existir otras creencias más informales, individuales, espontáneas, con un menor desarrollo doctrinal y litúrgico, que representen para el portador un sistema dinámico, congruente, estable, que lo compulsen de forma activa –aun cuando puedan estar dirigidas sólo hacia alguna esfera de la personalidad o momentos determinados de la vida– y represente un mecanismo para el autodesarrollo de su individualidad. La religión, como forma de concepción del mundo, aporta sentidos al hombre, aunque no sea la única fuente. Las creencias pueden llegar a convertirse en el sujeto portador, en un sistema de orientación y acción de máxima importancia en su vida, llegando, incluso, a determinar su accionar social o simplemente no trascender más allá de situaciones particulares y concretas o constituir solo una forma imitativa de conducta. El objetivo de la investigación es conocer la significación que tienen las creencias y prácticas religiosas en el contexto actual, indagar en las formas en que lo religioso puede incidir y regular al creyente y aportar al análisis de la relación entre la religión y los cambios sociales.