Tomado de: www.ipscuba.net
Foto: Tomada de Facebook
Activistas de diferentes grupos de la comunidad LGBTI articulan acciones para los espacios presenciales y virtuales, en favor de la concientización acerca de los beneficios del Código de las Familias, que será llevado a referendo el próximo 25 de septiembre.
Posicionamiento en las redes sociales, actividades en comunidades, realización y difusión de audiovisuales con historias de vida y sobre la percepción del Código, son algunas de las propuestas consensuadas para desarrollar cada persona en su ámbito de actuación.
Entre las alternativas que buscan llegar a un mayor número de personas, activistas de La Habana, Matanzas y Pinar del Río sugieren compartir las historias de personas que serán beneficiadas con el Código de las Familias, y contenidos simples y directos en los grupos de compra-venta de Facebook, donde hoy se producen debates al respecto.
Integrantes de varios colectivos valoraron la necesidad de hacer énfasis no solo en el reclamo por el matrimonio igualitario, la adopción y la responsabilidad parental -entre los más polémicos-, sino también otras demandas para el bien de las familias y las personas en temas de derechos, cuidados y sucesión, entre otras.
Aunque se recalca que los derechos no se plebiscitan, es un hecho que el referendo tendrá lugar en septiembre, luego de que la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento unicameral) aprobara la versión 26 del proyecto.
La votación se realizará en un momento de grandes tensiones, entre ellas, inflación, carestía de alimentos, altos precios, frecuentes y prolongados apagones, un reciente incendio industrial de grandes proporciones que puso a prueba la capacidad de gestión gubernamental y el rechazo al código por parte del fundamentalismo religioso, en una articulación nunca pensada.
En ese contexto, matizado por un rechazo no despreciable a todo lo que parte desde la institucionalidad, una de las mayores preocupaciones de activistas es que, para no pocos, el voto negativo sea una suerte de pase de cuentas por las severas condiciones de vida hoy en el país.
No desechar ningún espacio
Ante la importancia del momento, las propuestas activistas coincidieron en no desaprovechar ningún espacio, medio ni público y tratar de incidir en quienes no tienen una idea clara de votar por el sí o por el no.
“Este no es un momento en que debamos quedarnos de manos cruzadas”, destaca Adiel González, activista de Afroatenas y del sector cristiano, de Matanzas.
Hacer alianzas con los medios de comunicación masiva, oficiales e independientes, y motivarles a que compartan materiales con información, vinculando todo con el Código y sus artículos, hacer infografías y diseños para promover el SÍ son otras de las alternativas.
Para propiciar la sensibilización, Yoelkis Torres, coordinador general del proyecto Afroatenas, de Matanzas, considera oportuno presentar en su espacio la herramienta diseñada por el medio de comunicación digital El Toque sobre el código, que de una manera atractiva y entendible recorre cada uno de los artículos del documento.
También en el territorio matancero, hasta el 25 de septiembre, se prevé proyectar audiovisuales y distribuir las tarjetas de El Toque y las de la iniciativa Mes de la Historia LGBTIQ+ Cuba.
En una reciente publicación, Mes de la Historia señalaba que “el próximo mes de septiembre estará cargado de emociones y esperanzas para todos aquellos que llevan años luchando por sus derechos. Los abuelos, los padres, los niños, las personas que deseen casarse estarán entre los beneficiados por el Código de las Familias”.
Para esta iniciativa, que compartió postales bajo la etiqueta #síporlasfamilias y propuso cápsulas de video para las redes sociales, la sociedad cubana no es la misma de hace cuatro décadas y es una necesidad actualizar la legislación sobre las familias. “Este es el primer paso para la construcción de una sociedad más inclusiva”, resaltó.
Iniciativas
Espacios culturales como El Divino, Le Chansonnier, Multicine Infanta, Pazillo, Casa Miglis, Club Amanecer, Las Vegas, El Mejunje, ArteSano, Fábrica de Arte Cubano acogen conversatorios y proyección de materiales.
Entre las iniciativas de activistas se encuentra compartir en redes individuales y colectivas campañas como El Código Sí Suena, EntreDiversidades, Dame la Mano, además de crear un grupo de Whatsapp que conecte a personas de varias provincias y, en lo posible, llegar a espacios no urbanos y otros donde es fuerte la presencia de iglesias fundamentalistas opuestas a la aprobación del código.
A ello se suman propuestas de producir contenidos sobre el articulado del Código de las Familias, colocar pegatinas, volantes y otros materiales en murales de policlínicos y consultorios médicos, medios de transporte público, paradas, parques, escuelas, cafeterías y restaurantes.
Además, pretenden posicionar el tema en la radio y buscar la colaboración de influencers para transmitir mensajes a favor del Código.
Lidia Romero, jurista y activista, llama a evitar los discursos de odio que se respiran en las redes y considera que el conocimiento y el estar informados permiten responder, siempre con líneas cortas, a inquietudes y dudas sobre lo que se quiere con la norma.
“Incluso, de aprobarse el Código, es una carrera de resistencia, porque queda mucho por desaprender”, apunta. (2022)