Asociación regional apuesta por empoderamiento femenino cubano

Logo del capítulo cubano de la Asociación de Mujeres Empresarias Líderes de América y el Caribe (Amelac).

Tomado de: www.ipscuba.net
Foto: Cortesía de la entrevistada

Un grupo de emprendedoras cubanas se afilian a la Asociación de Mujeres Empresarias Líderes de América y el Caribe (Amelac), para obtener conocimientos sobre el mundo del empresariado y las realidades de mujeres de otros contextos e intercambiar sus experiencias.

Amelac es una organización dedicada a la educación popular de las mujeres a través de programas educativos, mentoría y apoyo integral que tiene la misión de fomentar la igualdad de género y proporcionar recursos que ayuden a las mujeres a alcanzar su máximo potencial en todas las áreas de su vida.

El capítulo cubano de Amelac lo dirige Maricel Ponvert, trabajadora por cuenta propia, conocida en la comunidad emprendedora cubana por el negocio D՚Marie Centro Holístico de Bienestar, dedicado al masaje en varias modalidades y al reiki.

Los caminos

Llegué a la asociación “por casualidad, por una convocatoria que hicieron en Internet y me llamó la atención”, dijo Ponvert, quien se declara feminista desde su niñez.

Para la emprendedora, “el verdadero empoderamiento de la mujer no es tener poder sobre nadie, sino tener poder sobre ella, saber qué quiere, cómo lo quiere y para qué lo quiere. Eso es el verdadero empoderamiento”.

Su pertenencia a la asociación es coherente con su vida y su historia. “Cuando yo era muy niña, que empecé a leer, existía una organización que se llamaba Las feministas del Cairo. Aquello me llamó mucho la atención y pese a mi niñez, leía todos los artículos sobre esas mujeres que estaban defendiendo sus derechos en El Cairo y los disfrutaba”.

Según recuerda, se veía y se visualizaba dentro de aquella organización, apostando por el sexo femenino y sus derechos.

“Tuve la suerte de nacer en Cuba, donde siempre ha habido una lucha por darle una posición a la mujer, quizás eso me haya hecho sentirme más cómoda en aquello que yo quería en un momento determinado”, valoró.

El hallazgo

“Ese momento llegó, encontré la convocatoria de Amelac, me leí todo lo establecido para participar, inmediatamente mandé mis datos y fui aprobada”, comentó.

Sucedió en octubre de 2023 y durante un año no pasó nada, pero en octubre de 2024, la presidenta de la asociación, que radica en Aguas Calientes, México, realizó una reunión virtual y les comunicó que había quedado vacante la plaza de directora.

Cuando se hicieron las propuestas, alguien expresó su nombre, junto a otra proposición. Al principio, pensó negarse, pero se dijo: “Sí, Maricel, tú te lo debes”, y aceptó. En la votación resultó electa como directora del capítulo Cuba.

“Lo que hacemos desde Cuba a Amelac es recibir talleres y seminarios sobre cómo funciona el empresariado en el mundo, sobre todo, el femenino. Eso es importante, porque saber no ocupa espacio y al ver cómo funciona, me he quedado asombrada cuando advierto que en otros lugares del mundo la mujer, solo por serlo, es menos remunerada en salario que el hombre”, dijo.

Entonces, consideró, eso es un valor agregado a las posibilidades que tenemos nosotras como mujeres en nuestro país y si yo, tan metida en estos asuntos, desconocía esos elementos, pueden no conocerlos otras, porque no es un tema que se maneje normalmente.

Además, pertenecer “es una forma de socializar con mujeres de países de aquí de América porque las hay de Chile, de Argentina, de Brasil, Colombia, México y Guatemala, entre otras, y somos mujeres que intercambiamos entre nosotras”.

A veces, algunas personas tienden a pensar que las cubanas no están preparadas, “por eso disfruto mucho cuando nuestras mujeres hablan y el resto se sorprende del nivel que tenemos nosotras aquí en nuestra sociedad y también las cosas que como mujeres podemos disfrutar”.

Crecer y más

Cuando Ponvert asumió el capítulo, en noviembre, lo integraban apenas seis mujeres, pero en ese corto tiempo la cifra ha crecido a una veintena de integrantes.

“En Amelac, hay tres categorías de afiliadas: las empresarias, aquellas que ya tienen sus mipymes; las emprendedoras, las trabajadoras por cuenta propia, y las soñadoras, mujeres que se están preparando y están preparando sus propios proyectos, estas dos últimas son las que predominan en el capítulo cubano”.

El objetivo de empresarias y emprendedoras es acompañar, apoyar y ayudar a llegar a su meta a las soñadoras que están optando por tener su empresa y también demostrarles que se puede emprender en Cuba, destacó.

“Nos estarnos preparando con elementos importantes para progresar y no solo podemos mostrar lo que tenemos, sino también aprender para en otro momento económico del país aplicar lo que estamos aprendiendo de esas personas”, agregó.

El capítulo de Amelac Cuba interactúa con las afiliadas cubanas de forma híbrida, presencial y virtual, y con las colegas de la región mediante grupos en redes sociales, aunque Ponvert aspira que puedan conocer la realidad cubana en un encuentro en el país. (2025)