Autor: Ovidio D´Angelo Hernández
La manifestación de prácticas cotidianas, relaciones y valores sociales, en las personas y grupos poblacionales, ocurre en una trama compleja de interacciones entre diversos factores de la realidad social y en la interacción de procesos de nivel micro, meso y macrosocial. No dependen sólo de una política educativa y de las buenas intenciones de los agentes socializadores. Ellos están saturados de la realidad misma de las prácticas sociales y las políticas diversas en todos los ámbitos de la sociedad.
Es así que, en los procesos microsociales, se anidan prácticas y patrones de interacción social, representaciones e imaginarios sociales que, aunque parten de tradiciones propias, están en interjuego con referentes ideológicos y prácticas macrosociales, ya sean institucionalizadas o no, de manera que estas prácticas y representaciones en lo micro están transversalizadas por los referentes de más alto nivel: lo macro está en lo micro –y viceversa, en alguna medida- (Morin. E. 1990). Todo ello impacta en la formación de valores en los grupos sociales. En el trabajo se analizan algunas consecuencias de estas interconexiones en el ámbito comunitario de nuestra realidad actual.