Tomado de: www.ipscuba.net
Tras andar de espacio en espacio prestado donde comenzar a gestarse, formar el primer núcleo e introducir la atención a la violencia en Cuba, contribuir a la formación de capacidades, el empoderamiento y la articulación con la academia, arriba a sus 40 años el Centro Oscar Arnulfo Romero (OAR).
Para conmemorar el aniversario, en la sede de OAR en La Habana, se reunieron integrantes del centro, representantes de los Talleres de Transformación Integral del Barrio (TTIB), investigadores y colaboradores para construir colectivamente una línea del tiempo que incluyó pasado, presente y hasta proyecciones futuras.
La historia, construida por diferentes grupos, se enfocó en tres etapas: nacimiento-inicios (1984-2005), crecimiento-madurez (2006-2016) y fortalecimiento-consolidación (2017-2024).
Esos periodos se dividieron en diferentes ámbitos, entre ellos, comunicación y trabajo con hombres, fortalecimiento institucional, articulación con los sectores de salud, educación y académico, acompañamiento a experiencias de transformaciones sociales, Articulación Juvenil y campaña Evoluciona.
Labor y retos
En el encuentro varias voces se alzaron para exponer el trabajo del centro de inspiración cristiana en diferentes etapas de sus vidas y en la introducción de temas y prácticas de trabajo en las comunidades, que propiciaron el crecimiento personal y profesional de líderes barriales y de otras personas, según reconocieron.
Caridad Diego, jefa de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Partido Comunista de Cuba, recordó los inicios del Grupo de Reflexión y Solidaridad OAR, sus actuales líneas: el quehacer socioteológico y las acciones por la inclusión, la no violencia y la igualdad de cubanas y cubanos.
En nombre de la institución partidista, la funcionaria reafirmó el apoyo a esa labor.
Al sintetizar las cuatro décadas se destacó el compromiso, la valentía y la solidaridad como esencias de la institución de la sociedad civil. Además se lanzó la propuesta de recoger en un documento esa historia llena de desafíos, incomprensiones e hitos.
Procesos
Según trascendió en el encuentro, a partir de 2007, las acciones aisladas para visibilizar las ac de OAR pasaron a tener una estrategia que acompañó los diferentes procesos, incluidos los relacionados con la violencia.
Desde entonces, el centro se articuló con otras organizaciones y participó activamente en el diseño y la implementación de las primeras campañas nacionales por la no violencia hacia las mujeres y las niñas.
En este ámbito, OAR promovió la realización y promoción de audiovisuales, concursos y premios, entre otras iniciativas que involucraron a investigadores, estudiantes, profesionales, actores comunitarios, el sector cultural y organizaciones nacionales y de la cooperación internacional. Esta última constituyó un respaldo para el centro y la materialización de los proyectos.
Participantes en el conversatorio dedicado al aniversario resaltaron los aportes del servicio de consejería, la formación de capacidades, los programas de atención integral comunitaria sobre violencia de género y de autocuidado para el personal que trabaja estos temas.
De igual modo, destacaron la importancia de las guías técnicas metodológicas elaboradas por el centro para personas en situación de violencia.
Otros procesos que señalaron fue el surgimiento del Foro Permanente, espacio para el diálogo con la academia, los actores sociales y públicos diversos y la creación de la Red Articulación Juvenil por la Equidad Social y la No Violencia, en 2016, cuyo activismo abarcó a diferentes provincias en procesos como la aprobación de la Constitución, en 2019, y del Código de las Familias, en 2022.
En los procesos en que interviene el Centro OAR, coincidieron participantes, priman los enfoques transversales, intersectoriales y multidisciplinarios, la articulación y las alianzas con diversos actores.
Romper moldes
Si bien promover el tema de la violencia con grupos de mujeres, sobre todo en barrios con índices elevados de maltrato fue un hito, con el inicio del trabajo enfocado en los hombres nuevamente se rompieron los moldes.
Según se expresó durante la construcción de la línea de tiempo, a partir de procesos de sensibilización en las comunidades, se implementaron los talleres de capacitación sobre masculinidades. Luego, en 2011, surgió la Plataforma de Hombres por la no violencia y la equidad de género, que desarrolla capacitación, actividades en las comunidades y participación en las campañas.
Entre los hitos de OAR sobresalió la colocación en 2015 de la primera valla pública alusiva a la violencia, en una de las vías más transitadas de la capital cubana.
Otro resultado relevante, de conjunto con la Articulación Juvenil, comunicadores y diseñadores, fue la campaña Evoluciona, que durante dos años estuvo presente en diferentes espacios, procesos y campañas afines. (2024)