Por: Claudia Castilla
Desde 1999 la UNESCO declaró el 21 de marzo, día Internacional de la Poesía. Desde el año 2012 las Naciones Unidas declararon al 20 de marzo, Día Internacional de la Felicidad. El primero con el objetivo de “sostener la diversidad de los idiomas través de la expresión poética y dar a los que están amenazados la oportunidad de expresarse en sus comunidades respectivas”. Con motivo del segundo, el Secretario General de las Naciones Unidas proclamaba “[…] fortalezcamos nuestro compromiso con el desarrollo humano inclusivo y sostenible y reafirmemos nuestra promesa de ayudar a los demás.”
Dos celebraciones consecutivas –hermosas celebraciones por cierto- que quizás sin pretenderlo, se han articulado en sucesión cabalística, para el bien de esta, nuestra humanidad.
Pretexto que nos regalan estos días para la inspiración y el impulso, también de quienes hacemos ciencias sociales. ¡Felicidad y poesía! A final de cuentas, aquello que nos hace trabajar cada día: el bienestar, la plenitud y la felicidad –que son en esencia poesía- de nuestras sociedades.