Tomado de: www.ipscuba.net
Foto: Jorge Luis Baños/ IPS
Con unos muy bien representados y otros con escasas muestras se desarrolló la II Feria de Desarrollo Local en La Habana, que en cierta medida permite medir el estado de la autonomía de los municipios y la apuesta de Cuba por impulsar la economía desde los espacios más territoriales.
Según se dijo en la clausura, participaron 3 308 expositores, entre micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), entidades estatales, trabajadores por cuenta propia, proyectos de desarrollo local (PDL) y algunas empresas extranjeras radicadas en el país.
Acudieron, se informó, 186 empresas estatales, 228 mipymes, 99 PDL, dos cooperativas no agropecuarias, tres cooperativas agropecuarias y 82 trabajadores por cuenta propia.
La lejanía, los problemas con el transporte por limitaciones con el combustible, los elevados precios para el montaje y la incertidumbre acerca de los gastos y beneficios de participar se consideraron causas de la reducida presencia de representantes de más de 3.000 mipymes y unos 400 proyectos de desarrollo local.
El encuentro, del 11 al 16 de julio, tuvo como sede a Expocuba, a unos 25 kilómetros del centro de La Habana, y estuvo dedicado a emprendimientos de jóvenes y a las exportaciones.
Para Luis Carlos Góngora, director de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior del gobierno en La Habana, la presencia joven –1 076 menores de 35 años, 35,7 por ciento del total– “es prueba de que muchos han escogido el camino del emprendimiento en Cuba”.
Según dijo en la inauguración: “queremos que tengan confianza en que sus proyectos son posibles, necesarios, importantes y una de las salidas para la situación actual”.
Aportes y desafíos
En el caso de las exportaciones, asunto pendiente desde hace años porque no se logra responder a la urgencia de generar más bienes y servicios exportables para la entrada de divisas, se llamó a trabajar con “fuerza y dinamismo en dotar de la calidad necesaria productos y servicios para los mercados internacionales”.
Acerca de la esencia de la feria, Góngora opinó que con el desarrollo local “es posible eliminar las enormes diferencias que hay en determinados territorios entre unos barrios y otros, entre una población y otra, donde la accesibilidad a los servicios no es pareja”.
“Apostamos al desarrollo local también porque necesitamos, desde una visión local, buscarle solución al problema de la vivienda; porque necesitamos, desde una mirada territorial, encontrar una parte de la solución a la alimentación”, dijo.
Necesitamos, indicó, “apostar a un lenguaje local, que la gente hable de presupuestos locales, ingresos, sistemas de transporte, estructuras empresariales locales, y que esa mirada vaya abriendo el camino a un país descentralizado en el que cada territorio asuma una ruta propia para su desarrollo”.
Como novedad, se realizaron intercambios de las direcciones de ministerios con actores económicos de actividades afines, donde se habló de trabas que persisten, malas interpretaciones de las normativas y demora en dar respuesta a inquietudes y trámites.
Durante uno de esos encuentros, el ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, se refirió al déficit de divisas y llamó a deslindar entre las limitaciones financieras y de recursos materiales y las trabas –normativas, prohibiciones y mecanismos burocráticos– que impiden el desarrollo de las fuerzas productivas.
Práctica y teoría
En la primera edición de la feria, en 2022, paralelo a la expoventa sesionaron conferencias y presentaciones. La edición de 2023 tuvo un primer segmento, en junio, que incluyó un encuentro teórico para reflexionar sobre el momento actual del desarrollo local y mostrar las mejores experiencias actuales.
Especialistas destacaron en ese espacio que las ciencias necesitan articular su desempeño con los requerimientos locales de desarrollo para que estos funcionen como verdaderos lanzadores del ámbito municipal, así como con los procesos de innovación.
Para la investigadora Maelia Pérez, el contexto económico de nuevos actores y formas de gestión y sus relaciones con el tejido empresarial se caracteriza por ser un escenario novedoso y desconocido por muchos.
A su juicio, existe una resistencia para ceder y acceder a la creación de relaciones de intercambios e interacciones más amplias y abiertas.
También consideró que el momento se diferencia de anteriores por contar con normas que condicionan la presencia del sector privado en las relaciones de comercio exterior, regulaciones bancarias, de acceso a financiamiento y a mercados.
Sin embargo, para Pérez existe desconocimiento de los mecanismos, herramientas y soluciones legales que permiten legitimar interacciones y crear alianzas estratégicas.
En declaraciones a medios locales, Hiram Marquetti, profesor del Centro de Estudios de la Administración Pública de la Universidad de La Habana, opinó que “no se puede hablar de desarrollo local cuando no eres capaz de entender la dimensión y amplitud de los temas del desarrollo”.
Aunque los municipios cuenten con sus estrategias de desarrollo, todavía resulta insuficiente el nivel de socialización de estas, y se requiere de preparación mínima y de herramientas con vistas a hacerlas más territoriales, valoró el profesor. (2023)