Jóvenes universitarias crean Red Feminista para el activismo y la colaboración

¿Qué es vivir sin violencia?, a esta interrogante respondieron las asistentes al encuentro desde lo individual y lo colectivo.

Tomado de: www.redsemlac-cuba.net
Foto: SEMlac Cuba

Desde este 29 de noviembre, el estudiantado de la Universidad de La Habana cuenta con una Red Feminista Universitaria que les una en el activismo y la colaboración contra las violencias machistas. La red quedó constituida en el cierre de la Primera Jornada Estudiantil por la No Violencia de Género, en el Salón de los Mártires de esa casa de altos estudios.

Anabel Antuña, estudiante de Sociología y una de las impulsoras de la iniciativa, dijo a SEMlac que la red es una apuesta a que funcione como articulación entre todas las personas que actualmente mantienen un activismo feminista en el entorno universitario de la capital.

Un espacio que “nos permita estar unidas para luchar”, para “denunciar toda la violencia que vivimos a diario, seguir estudiando y formándonos sobre feminismos y socializar nuestros conocimientos con otras personas para sensibilizarlas”, escribió posteriormente en la red de mensajería Telegram, a propósito de las motivaciones para crear esta red.

“Conversando un poco sobre por qué necesitamos una universidad feminista, hablamos de toda la violencia que vivimos a diario en la universidad, de cuán expuestas estamos las mujeres a esta violencia y no pasa nada, no se dice nada, no se hace nada.

“Hablamos de la importancia de conectarnos con otras luchas, que de igual modo contribuyen a la emancipación. Hablamos de la necesidad de ser creativas, de construir juntas nuevas formas de hacer, de ser ejemplo para ganar confianza en los otros y lograr cambios reales”, apuntó a modo de resumen de los debates que precedieron a la votación y aprobación de esta iniciativa.

Este ha sido el primer paso en el camino hacia una conformación más sólida de la red, la cual aspiran cuente con el reconocimiento de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) y de otras instancias, y donde una fecha como el próximo 8 de marzo, cuando se conmemora el Día Internacional de la Mujer, funcione para proyectar acciones coordinadas. 

Aunque en otros momentos se han realizado encuentros feministas en el entorno universitario, este es el primero concebido como jornada y enfocado en crear alianzas y conectar un activismo actualmente disperso

Con esta motivación como referente, se realizaron desde el pasado 7 de noviembre tres encuentros, con el apoyo de la FEU de la Universidad de La Habana y como parte de las acciones de la Jornada por la No violencia contra las mujeres y las niñas, organizada cada año del 25 de noviembre al 10 de diciembre.

Uno de estos intercambios propició un taller de sensibilización sobre la violencia de género, el cual contó con una amplia participación de jóvenes, según sus organizadoras; se realizó un cine debate sobre acoso callejero donde, entre otros materiales, se proyectaron y analizaron experimentos sociales realizados por la campaña Evoluciona.

Participantes en el encuentro manifestaron sus expectativas y opiniones en torno a la importancia de incluir contenidos sobre feminismo en los planes de estudio, evitar recluirse en los muros universitarios y lograr un verdadero impacto social de las investigaciones con perspectiva de género que se realizan en las diferentes facultades.

Una universidad comprometida con la equidad

La jornada de cierre nucleó a una veintena de muchachas y muchachos que conectaron en torno a interrogantes como ¿qué es vivir sin violencia?, lo que propició un ejercicio de proyección hacia la aspiración de hacer de la universidad un espacio inclusivo, de respeto al otro y de equidad de género.

Imprescindible resultó la referencia al pensamiento de grandes feministas internacionales, como Angela Davis, Rosa Luxemburgo o Audre Lorde, a la hora de reconocer en el feminismo un modo de vida, el compromiso con la emancipación, que se entiende desde las pequeñas luchas cotidianas.

Así lo concibe Ammy Curbelo Milá, estudiante de segundo año de diseño gráfico, para quien el feminismo “más allá de un movimiento, es algo personal”, a la vez que reconoce en ese espacio íntimo un lugar para propiciar cambios.

“Para mí lo más importante ha llegado a ser que cada persona que yo conozca intente interiorizarlo”, dijo. Esta joven estudiante identifica la necesidad de incorporar a los hombres como aliados, pues ellos muchas veces no tienen “la posibilidad de desarrollarse con masculinidades sanas”.

José Julián Díaz Pérez, quien cursa el tercer año de la carrera de Matemática y es además presidente de la FEU de la Universidad de la Habana, agradece tener un grupo de amigas feministas que le han enseñado a “detectar opresiones en las dinámicas diarias” y a incorporar un grupo de valores antipatriarcales a los principios éticos y sociales que ya compartían.

Para Claudia, estudiante de primer año de periodismo, las grandes luchas de los feminismos también están contenidas en las pequeñas luchas cotidianas y en el ejemplo que podamos dar a las generaciones que nos preceden. “Si detrás de mi viene una niña, que ve que no he dejado que un hombre me mancille, y esa niña se da cuenta que el hombre no tiene derecho a meterse contigo, estamos haciendo algo”, opinó.

El objetivo de este ejercicio de cierre de jornada, refiere Antuña, era “poner en evidencia cuán conectados estamos, cuántas personas nos colocamos en la misma línea, muchas más de las que a veces pensamos” y a partir de ahí entender la importancia de hacer alianzas y de superar el marco de una jornada.

Para la estudiante de Sociología, la creación de una Red Feminista Universitaria “no es la meta final a la que aspiramos, pero si es una victoria”. Aunque queda mucho por conquistar, es un buen comienzo, afirmó.