Por Claudia Castilla
La Habana se viste de fiesta en estos días de febrero, cuando como ya todos y todas estamos habituados por estas latitudes, llega la Feria Internacional del Libro de La Habana, ahora en su XXI edición.
Hay acontecimientos que se vuelven tradición e identidad, sin quizás proponérselo. Me atrevo a aventurar que para los cubanos y cubanas, la Feria del Libro es ya parte de aquello que nos une y da identidad. Así, en La Habana, los inicios de febrero llevan implícito también planificar la visita al otro lado de la bahía; pretexto para unir a familias y amigos, colegas y en general a hombres y mujeres, jóvenes, niños y niñas, en un interés común: el cautivador mundo de la lectura. La Feria une a todos y todas en una jornada bulliciosa, multitudinaria y también agotadora, pero siempre mágica, donde los libros te invaden los sentidos, las ansias, y nadie logra resistirse.
Aparecen entonces los libros que no alcanzamos a leer, aquellos que prestamos y perdimos, los que nos marcaron por siempre, y los mejores: aquellos que siempre añoramos encontrar. El tradicional viaje a la Feria del Libro es, además, un pretexto para venerar La Habana en su más hermosa versión, esa vista que a todos/as nos hace suspirar de orgullo: la entrada de la bahía y el malecón en toda su extensión.
Las últimas ediciones nos han traído también la suerte de extender sus predios a casi todos los rincones de la ciudad. Muchas son las sedes que paralelamente acogen presentaciones y presentaciones de publicaciones en todos sus formatos. ¡No hay modo de planificarse, es inútil, no alcanza el tiempo para llegar a todas, son demasiadas y siempre quedaremos con el deseo vivo (esa es parte de la magia también)!
Una de las sedes del Vedado que acogió al CIPS con sus publicaciones realizadas y concluidas en el 2011, fue la Asociación Cubana de las Naciones Unidas. Allí, los días 14 y 16 de febrero, nuestro Centro celebró en la Feria sus producciones editoriales, compartiéndolas con colegas de siempre y amigos nuevos, interesados todos y todas en acercarse al conocimiento de la realidad social cubana, desde nuestras investigaciones.
El día 14 abríamos con el lanzamiento de nuestro “Cuadernos del CIPS 2010. Experiencias de Investigación Social en Cuba” (más conocido como nuestro Anuario). Juan Carlos Campos, Subdirector Científico del CIPS y Fabián García Luna, miembro del Grupo Coordinador de esta publicación, iniciaban la presentación. Y para suerte de fiestas y amigos que arrancan la sonrisa de los encuentros hermosos, Aurelio Alonso, investigador del CIPS por muchos años, ahora amigo, colega y colaborador, vuelve a nosotros prologándonos el Anuario y acompañándolo en esta, su primera presentación pública.
Fabián anunciaba que “Los y las investigadoras del CIPS han optado con esta publicación atender lo esencial hoy en la sociedad cubana: ¿qué transformar y cómo? Acerca de esta pregunta y otras, se reflexiona en la sección principal: Las Ciencias sociales cubanas de cara a la transformación social. En este apartado se recoge la visión de varios intelectuales del área de la sociología, la economía y el campo jurídico sobre la relación transformación social-sociedad cubana. También se analiza, por varias investigadoras del CIPS, el papel que las ciencias sociales deben cumplir en el proceso de transformación social; y el rol que históricamente ha jugado dicha institución en acciones transformativas”, dejándonos con ansias de saber más.
Seguidamente fue presentado el CD Caudales2011, en su cuarta edición, por Claudia Castilla, miembro de la Comisión de Publicaciones del CIPS y Vivian López, Coordinadora de la sección Enfoques de este CD.
La jornada del 16 se presentaba, en la misma acogedora casa del Vedado, el libro “Violencia de Género en las Familias. Encrucijadas para el cambio”, de investigadoras del Grupo de Estudios sobre Familia del CIPS.
Una vez más el agradecimiento por la incitación, la provocación, la tentación al libro y a la lectura que cada febrero nos trae con su Feria.
