Autor: Ofelia Pérez Cruz.
Artículo publicado en CD Caudales 2008, Ed. Ciencias Sociales – CIPS, ISBN 959-06-1157-5, La Habana.
La entrada del siglo XXI nos incorpora como investigadores de la realidad social al reto de una reconstrucción epistemológica compleja en oposición a las perspectivas lineales unicausales, mecanicistas y los racionalismos a ultranza que primaron hasta mediados del siglo pasado. Se trata de reconocer los límites de la elementaridad, la importancia de la temporalidad, la multidimensionalidad y la transdisciplinaridad, en el crecimiento, como dice Houtart (2006) de la conciencia de la ambivalencia de lo real, de la aleatoriedad, de la incertidumbre, así como de la pluralidad de las instancias del conocimiento.
El por qué y para qué de la ciencia y la técnica exige el rescate de la atención del sujeto como actor social y su compromiso en la reivindicación salvífica que se demanda hoy de la ética respecto al mundo en sus más diversas manifestaciones.
Y la investigación de las ciencias de la religión en el mundo no escapa a estas problematizaciones y a la responsabilidad de hacerse partícipe de nuevas perspectivas para su abordaje.
Ya en la segunda mitad del siglo XX, el pensamiento crítico latinoamericano, liderado por la teología de la liberación, daba cuenta de nuevos sentidos de vida que implicaban una semblanza diferente de los excluidos, establecía relaciones de resistencia y enfrentamiento con las instituciones clericales, llámese principalmente Jerarquía Católica y estimulaba nuevas lecturas bíblicas y sociales del amor al prójimo, entre otras, proclamado para ser construido desde la práctica transformadora y la liberación social desde la opción preferencial por los pobres.
Temas como el Catolicismo Popular, manifestación significativamente diseminada en América Latina, captó para sí el interés de destacados estudiosos del fenómeno que desde la década de los años 60 han dedicado profundas reflexiones y notable espacio al debate de la temática, enfatizándose principalmente las preocupaciones relativas a las relaciones e interacciones que se suscitan entre la iglesia católica como institución hegemónica legitimadora de poder y las masas de fieles creyentes, devotos y peregrinos que representan esta manifestación devocional de la fe religiosa.