Pensamiento y activismo juvenil feminista se apropian de la universidad

Estudiantes universitarias se sumaron a una celebración del Día Internacional de la Mujer comprometida con el feminismo y que buscó desnaturalizar las violencias machistas.

Tomado de: www.redsemlac-cuba.net
Foto: SEMlac Cuba

Un lienzo en blanco se llenó de mensajes, denuncias y sueños a la entrada del Teatro Sanguily, en la Universidad de La Habana, el 8 de marzo. En el centro una frase marcó una ruta: «El patriarcado se va a caer».

“Estamos aquí para celebrar, porque el 8 de marzo fue un día que conquistamos. Estamos aquí también para celebrar todo lo que hemos alcanzado y el camino que nos queda”, dijo Anabel Antuña al dar la bienvenida a estudiantes y profesorado asistentes a la conmemoración por el Día Internacional de la Mujer, en la Facultad de Filosofía, Historia y Sociología de la casa de altos estudios capitalina.

Al interior del teatro un grupo de muchachas comenzó el encuentro poniendo voz a las desigualdades y violencias cotidianas, en un performance que mezcló situaciones comunes a muchas mujeres y también aquellas que son específicas de las más jóvenes.

Entre ellas se encontraba Elizabeth Hernández Martínez, estudiante de primer año de sociología, para quien este fue un día “muy mágico y emocionante”.

“Todas teníamos los nervios a flor de piel y fue muy lindo ver a esas personas que llegaron al espacio y lo disfrutaron junto a nosotras; ver la cara de felicidad de cada una de nuestras compañeras y ese brillo en los ojos, fue hermoso la verdad”, dijo Hernández Martínez a SEMlac.

El grupo de muchachas quiso retomar el sentido original de la fecha, cargada de reivindicaciones. Para ellas recordar a las mujeres que les antecedieron y celebrar los derechos alcanzados tiene tanta importancia como educar sobre el feminismo y romper con los esteriotipos y sospechas que le persiguen, incluso en los centros universitarios.

Por eso Hernández Martínez reconoce que todavía queda mucho por hacer en materia de equidad de género.

“Aún no somos libres, aún se nos violenta, aún se nos mata, aún se nos acosa, se nos maltrata, aún se nos priva de derechos. No queremos que nos feliciten, queremos que nos respeten, queremos libertad y equidad”, reflexionó la joven.

Las muchachas no estuvieron solas, además de la audiencia -casi a sala llena- las acompañaron autoridades universitarias, representantes de la Federación Estudiantil Universitaria (Feu) y reconocidas profesoras.

Cuatro docentes participaron en un conversatorio que incluyó reflexiones sobre los feminismos, los desafíos de las mujeres cubanas y las oportunidades que brinda el contexto cubano actual para la lucha por la equidad de género.

Claudia Damiani (diseñadora e integrante del colectivo Cimarronas) junto a las profesoras y académicas Reina FleitasYulexis Almeida y Clotilde Proveyer fueron las profesoras participantes en el espacio.

Al abrir el intercambio Daminani mencionó hitos y momentos en la historia del feminismo. La diseñadora también cuestionó mitos y tergiversaciones que siguen estigmatizando a este movimiento, teoría y práctica política.

“Otra tergiversación que existe es que el feminismo es solo cosa de mujeres y que el machismo es solo cosa de hombres y esto no es cierto; los propios hombres, a pesar de ser sujetos de privilegios en la dominación patriarcal, también son víctimas del machismo”, expuso Daminani.

Sobre la importancia de encontrar espacios mixtos para desmontar el machismo, la investigadora Reina Fleitas alertó que “no es posible transformar las condiciones de subordinación de la mujer si no se trabaja en los procesos y las relaciones de dominación, por eso este tema también tiene que ver con los hombres”, dijo.

La diversidad de las mujeres, las desigualdades que marca el racismo, la homofobia, el lugar de residencia, la edad, entre otras dimensiones, también fueron temas de la charla.

“Todavía hoy existen diferencias importantes en los avances de las cubanas. Por ejemplo, entre las mujeres urbanas y las rurales. Los resultados de investigación hablan de que todavía existen muchas mujeres en el país que no tienen propiedades o activos y ser dueñas de medios de producción es vital en el camino para alcanzar la autonomía económica”, dijo Fleitas.

La profesora Clotilde Proveyer destacó que las cubanas cuentan con una tradición de lucha, condiciones y fortalezas que en otras partes del mundo todavía son derechos por conquistar. Reconoció, además, que en la isla del Caribe sigue siendo un desafío alcanzar la plena igualdad de género y, en particular, implementar las leyes y programas que constituyen oportunidades para la justicia de género.

“Hay un fortalecimiento del feminismo en el país como movimiento y como teoría; ahora tenemos mayores recursos para poder implementar la perspectiva de género, que no es otra cosa que la perspectiva feminista, un aporte de la teoría feminista como resultado de las muchas luchas que a lo largo de la historia han llevado a cabo las mujeres”, dijo Proveyer.

“No podemos pensar que alcanzaremos un proyecto de justicia social plena en el país si no logramos completar el proyecto de justicia de género que implica el logro de la igualdad plena, que no es solo tener derechos y oportunidades diseñados, sino romper con todas las barreras que hacen imposible que algunas personas puedan disfrutar de los derechos y las oportunidades”, resaltó.

La profesora y afrofeminista Yulexis Almeida pidió cerrar el panel con un recorrido por el pensamiento feminista negro, la situación de desventaja de las mujeres y la población negra en ámbitos como la educación, la vivienda, el acceso a remesas y la brecha digital.

Las mujeres negras siempre han tenido que esperar un poco más por las mismas conquistas”, reflexionó la investigadora.

Sobre la situación en la educación superior dijo que en Cuba las universidades están feminizadas a partir de una mayoría de muchachas blancas, mientras que el grupo más desfavorecido en el acceso a la educación superior son los varones negros.

“Estas son realidades que solamente se visibilizan cuando buscamos y comprendemos la especificidad de estas problemáticas. Cuando miramos los problemas de manera global no podemos darnos cuenta de las particularidades que existen dentro de esos grupos vulnerables”, comentó Almeida.

Sobre estos problemas se concentra el activismo antirracista en Cuba, que al decir de la profesora cubana, expresa una diversidad de temas de interés, propuestas y acciones sociales y culturales.

No fue casual que en su primera acción por el Día Internacional de la Mujer, las feministas universitarias apostaran por juntar las voces de estas reconocidas académicas y apoyarse en sus conocimientos y experiencia.

“Estos encuentros son muy importantes porque hay muy poca información y educación sobre el tema y, en consecuencia, la mayoría tiene un concepto erróneo”, dijo a SEMlac la joven estudiante Elizabeth Hernández Martínez.

“Además, queremos organizar espacios donde cada persona, cada joven comparta sus experiencias y se le escuche en un ambiente seguro, queremos esa empatía que a tantos les falta. Aquí no sólo aspiramos a un futuro mejor, sino que luchamos porque suceda”, adelantó.