por: Dra.C María Isabel Domínguez García
Los acontecimientos que han tenido lugar en los últimos días en Cuba, con los sucesos protagonizados por un grupo de personas en el barrio de San Isidro en La Habana y las demandas de diálogo de un grupo de jóvenes artistas al Ministerio de Cultura, han sido difundidos y presentados internacionalmente como la evidencia de una supuesta crisis del proyecto social cubano.
Se trata de procesos diferentes: de un lado, las demandas legítimas de un sector de artistas y creadores, fundamentalmente jóvenes, que reclaman una mayor apertura de la institucionalidad para una participación más directa en las decisiones que les conciernen y, de otro lado, un sector que, siguiendo una agenda marcada desde el extranjero, intenta promover la desestabilización interna y el descrédito internacional para complementar el cerco que impone el recrudecimiento del bloqueo estadounidense.
No es casual que estos eventos tengan lugar en la etapa final del gobierno de Donald Trump –bajo cuyo mandato se ha implementado de forma sistemática todo un arsenal de medidas para ahogar la economía y las finanzas del país– con el claro propósito de forzar acciones que muestren un clima de caos que impida a la nueva Administración de Joe Biden flexibilizar las relaciones entre ambos países bajo el conocido pretexto de la supuesta violación de derechos humanos.
La Revolución Cubana, un proceso perfectible como toda obra humana, necesita repensarse cada día para, como dijera Fidel, “cambiar todo lo que deba ser cambiado”. Sus instituciones son parte de la obra cotidiana de todo un pueblo y se mantienen abiertas al debate propositivo y al diálogo de posiciones diversas siempre que se respete la soberanía y la dignidad de la nación. No puede haber diálogo bajo imposiciones.
Los centros cubanos miembros de CLACSO, rechazamos los intentos de desestabilización y la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de nuestro país, reafirmamos la defensa de la Revolución y nuestro compromiso de continuar trabajando desde el pensamiento crítico transformador en favor de una sociedad cubana, caribeña y latinoamericana independiente y democrática.
7 de diciembre de 2020
Centros cubanos miembros de CLACSO