Por: www.ipscuba.net
Foto: Archivo IPS Cuba
La urgencia del reconocimiento social y la redistribución equitativa de las labores de cuidado, de situarlas en el centro de la vida, la academia y las políticas públicas, con miradas interseccionales, feministas y de derechos humanos, centraron los debates del IV Taller Nacional de la Red Cubana de Estudios sobre Cuidados.
La cuarta cita nacional se propuso mantener los espacios donde anualmente se debaten los principales resultados, aportar a la construcción de las bases del sistema nacional de cuidado y conformar la agenda de continuidad del trabajo, explicó la socióloga y profesora Magela Romero, del equipo coordinador de la red.
En esta ocasión, al taller asistió la profesora argentina Laura Pautassi, experta de referencia internacional en el tema del cuidado, quien disertó sobre sus debates internacionales en torno a la importancia de entender el cuidado como un derecho humano.
“Ha sido nuestro interés enmarcar esa concepción en los debates que estamos teniendo, a propósito de las transformaciones normativas en el marco jurídico desarrollado en Cuba con el nuevo Código de las Familias”, dijo Romero.
Durante la cuarta edición del taller apoyado por la Fundación Friedrich Ebert y el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) se analizaron las bases de un futuro sistema nacional para el cuidado integral de la vida en Cuba, “desde las experticias, los resultados y las lecturas de especialistas de la red a nivel nacional”, apunto la especialista.
En la construcción participativa de esas bases, los equipos de trabajo examinaron, debatieron y propusieron modificaciones que enriquecen, en sus propósitos, objetivos, principios, enfoque, acciones y alcance, para su presentación a las autoridades.
La presencia en la clausura de la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó, y de la secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas, Teresa Amarelle, así como de representantes del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) evidenció la importancia que se le concede a las acciones de la red.
Visiones
Aseguró Romero que “se tratan de hacer política y acciones que se parezcan cada vez más a los municipios y una de las temáticas que está presente en el país es el envejecimiento de la población”.
En tal sentido, la presencia de integrantes de la red de cuidados en Guantánamo, Camagüey, Villa Clara y Sancti Spíritus permitió tener una visión nacional más allá de lo que se genera en la capital cubana.
Entre las ponencias de las profesoras Lucrines Azcuy y Yamila Roque, de la Universidad Marta Abreu de las Villas, se presentó un estudio sobre la gestión de los cuidados desde una política local y el análisis desde una experiencia en un municipio.
Por su parte, las investigadoras Ana María Ramos, Mirtha Yordi y Zhenia Proenza, de la Universidad de Camagüey, compartieron una mirada a los servicios estatales de cuidado para personas mayores institucionalizadas en Cuba.
Según explicó Ramos, la investigación trata de hacer aportes para transformar los sistemas estatales de cuidado en este tipo de servicios en Cuba, para beneficiar a las personas mayores, desde dos miradas principales: el enfoque de derechos y el enfoque de atención centrado en la persona.
“Queremos mirar hacia las personas mayores que están institucionalizadas, sus gustos y preferencias, para tenerlas en cuenta en esos cuidados”, destacó.
Además, Ramos remarcó la necesidad de contar con profesionales cada vez más capacitados, así como hacer que los espacios para los cuidados sean más hogareños y mejor integrados en el ámbito comunitario.
Intercambio y aportes
“Ver esos servicios con la mirada centrada en la persona y desde el enfoque de derechos permite abrir esa dimensión de que las personas institucionalizadas tienen derechos”, reflexionó Ada Alfonso, del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), quien alertó sobre la violencia institucional.
El profesor Jesús Menéndez destacó la importancia de que los gobiernos en los municipios, ocupados en las urgencias, se enfoquen también en lo estratégico y posean una visión diferente de los cuidados a largo plazo, más allá de las Casas de Abuelos, hogares de ancianos y la asistencia domiciliaria.
A su vez, señaló que los cuidados a largo plazo están permeados, al igual que los hogares, por la situación socioeconómica actual, y llamó a trabajar porque el país se acerque a un modelo que se merecen quienes permanezcan en él.
Especialistas apuntaron que los modelos de atención requieren capacitar a las personas que brindan el servicio de cuidado, según los nuevos enfoques para tratar a las personas mayores institucionalizadas, pues desde hace más de 10 años no se realiza esa capacitación.
Para la profesora Teresa Muñoz, no se explota la corresponsabilidad, un factor que consideró puede servir para mejorar la calidad de vida en las instituciones de cuidados, cuyo estado explicaría que sus capacidades se explotan solo al 55 por ciento, según un estudio concluido en 2021.
Por su parte, la socióloga Rosa Campoalegre llamó a abordar la división sexual del trabajo, pero también la racial y la etaria. (2023)