Autoría: Dra. Patricia Arenas Bautista, Ms. C. Maudel Cabrera Ardanás, Ms. C. Mario Martínez Morales, Ms. C. Ana María Piedra Medina, Ms. C. Rita Álvarez Ybarra, Lic. Claudia Fé Mayo Ramiro, Lic. Gréter González Álvarez y Lic. Yohanna Lobelle Rimada.
Colaboración: Dra. Ángela Casaña Mata, Ms. C. Yolanda Tacoronte Picart, Ms. C. Irina Barrios Osuna, Lic. Maví Pérez García, TM. María del Rosario Monet Carballeira y TM. Dania Pérez Díaz.
La labor del Grupo Cambio Humano (GCH) del Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas (CIPS), tiene entre sus pilares, la realización de los Talleres de Empoderamiento y Comunicación (TEC). Esta acción formativa, dirigida en lo fundamental a organizaciones laborales se ha venido realizando desde el año 2007 hasta la actualidad, solo con la interrupción imperiosa en 2020 y 2021 por la pandemia de la Covid-19. Se destacan los TEC por su sistematicidad, el cúmulo de registros sobre la evolución de su propio diseño y los disímiles resultados obtenidos a través de sus más de 13 ediciones.
Precisamente dicha sistematicidad en el trabajo condujo a la necesaria sistematización por un lado, de la metodología de los TEC (Arenas et al., 2021) y por otro de sus resultados y acciones de seguimiento (Arenas et al., 2022). Ambos informes de investigación tributaron al proyecto Empoderamiento, comunicación y cambio organizacional del propio GCH.
Este artículo se basa en el segundo de los informes antes citados referido a la sistematización de los resultados de los TEC y su seguimiento. Aun cuando se tomó como marco temporal para el análisis de los resultados el período 2007 – 2017, pudo avanzarse más allá sobre todo en el análisis de las acciones de seguimiento derivadas de los talleres en los años 2018 y 2019. Los TEC han tenido como objetivo central el logro de la sensibilización el empoderamiento; la extensión de esta temporalidad permitió comprender mejor los efectos de esta acción formativa, en relación al objetivo planteado, no solo en las personas que participaron sino también en una de las organizaciones más representadas.
La sistematización de experiencias constituye un enfoque metodológico que mucho ha contribuido al rescate de disímiles actividades, vivencias y desempeños profesionales y a la apropiación de aprendizajes que enriquecen dicha práctica. El enfoque asumido para la sistematización fue el planteado por Oscar Jara (2006) el cual en el propio proceso de investigación, fue analizado en varias ocasiones, considerando las convergencias con la labor que se propuso el grupo y con los requerimientos de la investigación –acción. Tanto la organización y clasificación de la información como el análisis crítico de la misma para la obtención de aprendizajes relevantes fueron propósitos contenidos en el enfoque asumido como estrategia metodológica.
Los resultados de los TEC y sus acciones de seguimiento fueron analizados desde el paradigma de la complejidad, que trae aparejado no solo múltiples miradas sino también la incompletitud de lo observado, el reconocimiento de niveles de partida y tiempos específicos en los que transcurre la dinámica humana (Morin, 2004).
En este sentido, los resultados de los TEC, a tono con el enfoque de la evaluación participativa (Earl et al., 2002 y Guba y Lincoln, 1989 citado por Apodaca, 1999 se valoran en mayor medida desde la percepción social de los implicados (percepciones y autopercepciones), en función de criterios evaluativos definidos previamente o construidos y enriquecidos durante el proceso, sobre las dimensiones del empoderamiento.
Asimismo las acciones de seguimiento constituyen una continuidad lógica de la sensibilización con el empoderamiento. Estas buscan fijar e incrementar los cambios positivos que hayan podido generarse y profundizar en aquellos elementos que contribuyen al empoderamiento del sujeto, comprendiendo no solo al individuo sino también a los grupos y las organizaciones.
En sentido general el artículo responde a la interrogante ¿En qué medida el TEC funciona para sensibilizar a las personas con el empoderamiento?, pero a su vez reflexiona a través del estudio de caso y las acciones de seguimiento en esta empresa, sobre la posibilidad de trascender a un empoderamiento organizacional, al menos en términos de sensibilización, con la perspectiva de lograr mayor impacto en el mejoramiento de la sociedad cubana.