Tomado de: www.ipscuba.net
Foto: Tomada de Facebook.
Una oportunidad para la capacitación, el intercambio, el fortalecimiento y la articulación de iniciativas de personas negras se propone ser el taller “Emprendimiento y racialidad”, los días 26 y 27 de octubre, organizado por la Experiencia Comunitaria Wenilere Cardenense y el Centro Cristiano de Reflexión y Diálogo (CCRD).
Este encuentro presencial apoya el surgimiento de negocios de afroemprendedoras en los últimos años en esa ciudad, situada a 147 kilómetros al este de La Habana, como un ejercicio de resiliencia en tiempos complejos.
El taller “surge como una especie de demanda de un sector del activismo antirracista en Cárdenas nucleado en torno a los proyectos Azabache, Wenilere Cardenense y la peluquería Afrotalla, así como de la población afrodescendiente”, dijo Alberto Abreu, escritor afrocubano y activista contra la homofobia, el racismo y todo tipo de discriminación.
Según declaró, en los últimos dos años, estimulados por estos proyectos, nacieron emprendimientos relacionados con la estética y el cabello de las personas negras. “A partir de diversas acciones se han establecido alianzas con otros que ya existían o han surgido”, destacó Abreu.
Además, apuntó que el taller tiene como antecedente la I Feria Nacional de Afroemprendimientos, que organizó el proyecto Azabache en enero de 2020 con la colaboración del CCRD, en el cual participaron negocios como Turban Queen, BárbarA’s Power, Estética, Afrodiverso, Afroarte, AfroStetica, Beyond Roots, Lo Llevamos Rizo, Mi rinconcito y MasKlasic, entre otros.
Otros antecedentes son los talleres de Azabache sobre el cabello y el autocuidado de las personas afrodescendientes y el Festival Infantil Amo mi negritud, con el estilista y rapero Roberto Álvarez, quien en visitas a la ciudad capacita a peinadoras de la comunidad, una línea de trabajo que permite ganar su sustento a mujeres negras de bajo recursos.
Razón de ser
De acuerdo con Abreu, la idea es propiciar el encuentro entre estas personas, sobre todo mujeres negras emprendedoras, doblemente invisibilizadas en los negocios privados no solo en Cárdenas, sino en todo el país.
El taller persigue brindar nociones de economía, derecho y marketing, necesarias para llevar adelante una pequeña empresa en este nuevo escenario, a partir de la experiencia acumulada por el equipo del CCRD que imparte esos temas desde hace años con resultados muy positivos.
“El encuentro no se limita a ser un espacio de confluencia que posibilite articulación y alianzas entre estas mujeres, sino que coloca el tema de la identidad racial y el orgullo identitario como un eje que articula y transversaliza otras cuestiones, como la necesidad de empoderarlas”, destacó Abreu.
Rita García, directora general del CCRD, señaló: “queremos trabajar el tema de estos emprendimientos, por lo que eso conlleva”.
“Hemos visto en el territorio a personas blancas mayoritariamente en las pequeñas y medianas iniciativas y en el trabajo por cuenta propia, y queremos trabajar con las personas afrodescendientes aprovechando todas las capacidades y conocimientos en esta población”, agregó.
A pesar de los pesares
Apuntó Sarahí García, coordinadora junto a Alberto Abreu del proyecto Azabache, que están invitadas al taller “personas negras que ya tienen emprendimientos o que quieren comenzar, y luego, en un segundo momento, se abrirá la convocatoria para sensibilizar a otras iniciativas ya establecidas en la ciudad”.
Entre los participantes confirmados están personas vinculadas a la línea de cosméticos Qué negra!, al proyecto Oshun So Confecciones, mujeres peinadoras, a la experiencia comunitaria Wenilere Cardenense y una joven que trabaja en la fabricación de aceites esenciales y de jabones con hierbas, especificó Abreu.
De acuerdo con el escritor y activista, el taller permitiría hacer visible en su entorno o entre el resto de quienes ejercen por cuenta propia que existe este mercado, “donde lo racial no es moda, sino que parte de una carencia: la necesidad de productos para el cabello de las personas negras”.
“Entre los retos de la iniciativa está pensar cómo estas mujeres negras de bajos recursos pueden armar un pequeño negocio y cómo puede crearse un fondo que les permita iniciarlo”, destacó.
Estudios en Cuba señalan que, en el trabajo por cuenta propia, la proporción de personas blancas empleadas es la más alta (8.4 por ciento) y la más baja, la de negras (6.4 por ciento), a la vez que el primer grupo está sobre-representado (68.1 por ciento), mientras que negros y mulatos están sub-representados (9 y 22.9 por ciento), respectivamente. (2021)