Televisión Serrana y comunicación comunitaria en Cuba

Tanto en los materiales audiovisuales como en los encuentros con sus públicos, el colectivo de Televisión Serrana propone reflexionar sobre la realidad de habitantes de comunidades montañosas del oriente cubano.

Tomado de: www.ipscuba.net
Foto: Cortesía de Kenia Gutiérrez y Ariagna Fajardo

“Televisión Serrana es formadora por vocación, desde que llegas, te transmiten el amor y el respeto por los seres humanos y la naturaleza; primero, te enseñan sobre ética, disciplina y compromiso; después, te instruyen en la comunicación audiovisual y su poder transformador”, explica la realizadora Kenia Gutiérrez.

Formada como documentalista en el Centro de Estudios para la Comunicación Comunitaria (CECC), de Televisión Serrana, Gutiérrez asegura: “la transferencia de saberes que se produjo desde los inicios fue crucial”.

Según cuenta, a solo tres años de su fundación, el proyecto de creación audiovisual liderado desde 1993 por Daniel Diez (1946-2023) en la comunidad San Pablo Yao, del municipio de Buey Arriba, en la oriental provincia Granma, insertó el Centro de Estudios con el objetivo de que “los mismos realizadores se convirtieran en formadores.

“Una de las ideas de Diez fue preparar a habitantes de esa zona de la Sierra Maestra interesados en aprender sobre realización audiovisual. La primera promoción sumó al Grupo de Creación de Televisión Serrana a los tres primeros graduados de la comunidad. A partir de entonces, se han realizado muchos talleres con carácter polivalente o por especialidades”, explica Gutiérrez.

Y agrega: “Aquellos que un día fuimos jóvenes, que ignorábamos todo acerca de los medios, nos convertimos en realizadores y profesores categorizados. Hemos impartido cuatro talleres internacionales para estudiantes de España (en dos ocasiones), Francia y Brasil. También recibimos becarios de ese último país, así como de Venezuela y Bolivia”.

Parte del trabajo del CECC consiste en mantener la asesoría a graduados que deseen seguir ejerciendo la realización audiovisual en sus comunidades.

“De ese modo, integran lo que hemos llamado Grupos de Creación Alternativa que funcionan en los municipios de Bartolomé Masó, Guisa, Niquero, Media Luna y Buey Arriba”, puntualiza la realizadora.

Comunicar las esencias de la vida rural

Rescatar, visualizar y difundir el quehacer y modo de vida de hombres, mujeres, niños y niñas de las montañas del oriente cubano es la misión de Televisión Serrana, dedicada a promover el conocimiento y uso de los medios audiovisuales con fines sociales, educativos y de promoción cultural.

Se impulsa “un proceso constante de aprendizaje, donde siempre hay un universo nuevo por explorar, que obliga a actualizar constantemente conceptos, formas y maneras de comunicar esas historias comunes que nos son muy cercanas; pero merecen ser contadas con el deseo y la sorpresa de la primera vez”, destaca Ariagna Fajardo.

En ese sentido, Fajardo y Gutiérrez resaltan que el CECC extiende los conocimientos más allá de su sede y llega hasta las escuelas, con el fin de iniciar a niñas, niños y adolescentes de las enseñanzas primarias y secundarias en el mundo de la realización audiovisual.

Allí se preparan a través de círculos de interés para el manejo y dominio de los medios tecnológicos con los cuales “retratan” sus entornos.

En ese sentido, en 2012 se iniciaron talleres que, bajo el título Mirada de joven, contaron con participantes de entre 12 y 23 años, quienes escogieron comunicar mediante realizaciones audiovisuales los temas que representaran un problema notable para sí mismos y la comunidad.

De esa experiencia resultaron tres materiales sobre el embarazo, la maternidad precoz y la prostitución. Al año siguiente, estudiantes de enseñanza primaria realizaron dos materiales referidos a sus juegos.

Tres décadas de televisión comunitaria

Televisión Serrana arribó en 2023 a su trigésimo aniversario, con más de 600 obras, entre ellas, las video-cartas, iniciativa de comunicación entre niñas y niños de comunidades de la Sierra Maestra que, en esas cápsulas audiovisuales, contaban cómo eran su vida, sus juegos y en qué trabajaban sus padres y madres.

Los primeros materiales de la televisora comunitaria tuvieron un enfoque antropológico, cultural y filosófico. Se reflejaban las tradiciones, la mitología, la historia y la identidad del campesinado cubano.

Con el paso del tiempo, las satisfacciones y dificultades de la vida en la Sierra Maestra, con énfasis en asuntos vinculados a la mujer, la ancianidad, la niñez y la naturaleza, marcaron la estética de los audiovisuales.

Al respecto, precisan Fajardo y Gutiérrez, “desde el respeto y el cuidado se han abordado los temas desde todos los géneros audiovisuales posibles”. (2024)