Un jesuita llamado Francisco

Autora: Sonia Jiménez Berrios
Departemento de Estudios Sociorreligiosos del CIPS

Cuba es de los pocos países en el mundo que han recibido la visita de tres Sumos Pontífices de la Iglesia Católica en menos de 20 años. El último de ellos fue un jesuita, que elevado al trono de Pedro, en 2013, decidió llamarse Francisco, en honor al santo de Asís, quien no solo fue el gran defensor de los pobres, sino, también, de la pobreza dentro de la Iglesia.

No pretendo hacer una extensa reseña del significado de ese viaje pastoral para mi pueblo, porque se recibía a quien desempeñó un rol fundamental en el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre la Isla caribeña y Estados Unidos, a solicitud de los entonces presidentes Raúl Castro Ruz y Barack Obama, respectivamente.